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Huída

Ese vaivén repetitivo. Ese ruido monótono. Se me cierran los párpados, caen por su propio peso, por el sopor que produce el calor de este reducido espacio en el que me encuentro.

Miro por la ventanilla. Los árboles se suceden sin parar, convirtiéndose en meras líneas de color difuminadas por la velocidad. No distingo paisaje alguno, todo se convierte en una amalgama irisada en la cual imagino lugares que nunca he visitado.

La luz se alterna con la oscuridad. Los túneles dan ese merecido descanso a mis ojos, que sufren con la intensidad de la luz solar, la cual no encuentra ningún obstaculo en las pocas nubes que adornan el cielo hoy. Aprovecho para recordar lo que dejo atrás, aquello que seguramente, en un futuro no muy lejano, acabará por tomar el mismo camino que el que yo decidí emprender y volverá a perseguirme con feroz tenacidad.

De repente, con el nuevo turno de luz, me devuelve a la realidad el revisor. No le presto demasiada atención y con un ademán cansado le entrego mi billete.

-Todo correcto, señor, muchas gracias.- Me responde jovialmente.

Esa voz. Es más cercana de lo que me podría haber esperado. Ese timbre se clava en mi memoria como alfileres en la carne fresca. Alzo la mirada con lentitud y observo esa cara...

Me devuelve una sonrisa cínica, doliente aderezada con una mirada llena de ira y odio.

Es él. No hay duda. Reconocería ese rostro entre un millón de caras más.

-¿Tiene algún problema señor? ¿Se encuentra bien?- Me pregunta el revisor.

Lo vuelvo a mirar y mis pulsaciones se relajan. Me he equivocado. Sigo sugestionado por los acontecimientos previos a mi huída. Tengo esa cara gravada a fuego en mi memoria.

-Señor, ¿se encuentra bien?- insiste el buen hombre enfundado en su uniforme gris.

-Sí, sí, perdone, le había confundido.- Le respondo amablemente.- Todo está bien, gracias.

Me tranquilizo y me vuelvo a recostar en mi asiento. No hay nadie más en el compartimento. Así que me estiro e intento descansar.

La monotonía del viaje vuelve a envolver la estancia. Otra vez los árboles, las tinieblas de los túneles y la luz del día marcan mi rutina. Me sumo en un sopor que me traslada a un estado de trance el cual trae a mi mente imagenes difusas que se confunden con la realidad.

A mi alrededor, casi llegando a tocarlos, veo seres que me observan, que susurran palabras ininteligibles. Les veo acercarse a mi, con interés casi científico. Noto su presencia como si de la realidad se tratase.

Sobresaltado me repongo. Salgo del trance al oír el chirrido de los frenos sobre los raíles. No hay nadie a mi alrededor. Rápidamente abro la puerta del compartimento y salgo al pasillo. Nada. Miro a ambos lados buscando pero sin saber el qué. Simplemente veo la puerta de separación entre vagones cerrarse bruscamente.

¿Habrán estado realmente allí? Mi pulso se vuelve a acelerar. ¿Estaré perdiendo el poco juicio que me queda?

Tambaleante, tembloroso, dirijo mis inseguros pasos de vuelta al compartimento. Trato de olvidar lo sucedido y de volver a sumirme en un sueño reparador que tanto necesitan mis alterados nervios.

Me despierto sobresaltado. ¿Qué ha pasado? El tren se ha detenido bruscamente. Miro por la ventana y veo, tranquilizado, que hemos llegado a una estación.

La tranquilidad no dura demasiado. Intento atisbar a través de la ventana qué sucede fuera, pero una intensa y espesa niebla no deja ver más allá de la ventana. Aquel sol reparador ha huído, dejando tras de si un grisáceo y monótono paisaje. No se oye nada. Tan sólo el ulular del viento.

Me levanto con precaución del asiento y abró lentamente la puerta, como intentado huír del lugar sin a penas hacer ruido. Escudriño el pasillo en busca del revisor o de algún pasajero, pero lo único que consigo ver es el vacío. Camino inseguramente por el pasillo y miro hacia el interior del compartimento contiguo al mío. Nadie, está vacío. Repito el mismo ritual en la siguiente habitación, pero el resultado es el mismo. Nadie.

Un repentino escalofrío recorre mi espina dorsal. Un gris presentimiento se apodera de mi razón. ¿por qué vuelve a repetirse todo? Recorro a gran velocidad el pasillo, comprobando que todos los compartimentos están completamente vacíos. Cambio de vagón y compruebo el resto de habitaciones. También están vacías. Me siento sólo, abandonado, hasta que una fugaz sombra atraviesa velozmente la insistente niebla del exterior.

Sin poder eludirlo por más tiempo, bajo del tren y me enfrento a mi destino.

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Problemas de incontinencia

El miércoles me reí muchísimo con un gag del hormiguero en el que Barrancas hacía que sufría de incontinencia.


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MEME

Desde el blog de Conxa i del de Estatekietecita me llega una propuesta de MEME. Intentaré hacerlo lo mejor posible.

Bien, la cosa es simple, hay que explicar 6 pequeñas cosas normales del día a día que te hagan feliz. De premio otorgar la posibilidad a 6 personas a que compartan con nosotros esas pequeñas alegrias.

Las cosas que me gratifican a mí, son las siguientes:

- Una buena ducha bien caliente al despertarme.

- El olor del sofrito.

- Hacerle cosquillas cuando intenta dormir.

- Estar en el sofá haciendo záping sin ningún objetivo.

- Sentir el aire frío de una mañana soleada de invierno.

- Reír y reír.

Y como objetivo del meme propongo a:

Mari, Nym, Lucía, Cielo Azul, Brönte, Cientifico Triste

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Nuevos planes de vivienda

Chafardeando por la web del ministerio descubrí los nuevos planes para conseguir que los jóvenes de hoy día se puedan emancipar y dejar a sus padres a una edad más temprana.



Con estad medidas seguro que se consigue aprovechar mucho mejor el suelo, bajar el precio de los alquileres y ganar en problemas de espalda de la población.

Fuente: Ministerio de vivienda

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Meme: Tu en canciones

Otra vez desde Amebas a la deriva me llega un meme, de los más interesante, el cuál se parece a uno que hace un tiempo confeccioné. A ver si sin mirar las respuestas se llegan a parecer.

Se trata de responder una serie de preguntas a través de canciones. Un poco dificilillo pero se intentará.

Llevo más de dos semanas intentando encontrar las canciones adecuadas. Si que es difícil, madreeee.

  • Hombre o mujer?: Simple Man - Lynyrd Skynyrd
  • Descríbete: Who i am - Jessica Andrews
  • Describe cómo la gente te ve:
  • Describe cómo sientes que eres:
  • Describe cómo quieres ser: Shine - Take That
  • Describe a tu ex novia/o: You're beautiful - James Blunt (quedáos con la letra completa)
  • Describe a tu actual novia/o: You are so beautiful - Joe Cocker
  • Describe dónde querrías estar: Right here waiting - Richard Marx
  • Describe qué quieres hacer: Rule the world - Take that
  • Describe cómo vives: It's my life - Bon Jovi
  • Describe cómo amas: Te regalo - Carlos Baute

De verdad que me ha costado bastante, mas que nada por no encontrar las canciones. Se lo paso, si lo quieren hacer, a:

Estatekietecita, Lucía, Nymnia, Conxa y a todo aquel o aquella que lo quiera recoger.

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Adivina la serie 20

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Tenemos chica nueva en la bloguesfera

Después de darme la tabarra (insistir insistentemente) un año enterito, diciéndome que qué hacía malgastando tanto tiempo delante de la pantalla escribiendo tonterías, se ve que le ha picado el gusanillo.

Quizás le habrá picado la curiosidad, no sé, lo único que realmente sé es que se ha decidido a abrir un nuevo espacio personal, "osease", un blog.

En él nos deleitará con curiosidades personales, con sus aficiones, sus (nuestros) pajarracos, las tonterías de las que nos solemos reír, etc. Así que es de esperar un espacio fresco y divertido.

Démosle la bienvenida a Buenas noches Tío Peloche.


No me preguntéis el porqué del nombre, ya os lo explicará ella ;)

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Ya??

Aunque parezca mentira, tal día como hoy pero de hace un año me decidí a teclear por primera vez la dirección de blogger en la barra de direcciones del firefox en mi ordenador.

Tal día como hoy hace 365 días inicié mi andadura como blogero.

En esta fecha, 15 de octubre de 2008, el blog acumula 238 entradas con 1246 comentarios (he conseguido poner el widget esta mañana jeje).

El tiempo, como en todo, ha pasado volando. Parece mentira la velocidad que consigue cuando estás ocupado.

Gracias a todos y a todas por vuestros comentarios y por vuestra ayuda.


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TV sucks

La palabra "sucks" es un vocablo inglés coloquial el cuál significa que da asco. Se puede usar en infinidad de situaciones, cuando te refieres a un profe que no te gusta ;), hablando sobre el equipo rival o incluso si estás pensando en el político aquel que no para de meter cizaña sin aportar nada nuevo (no pongo nombres, así nadie se siente ofendido jeje).

Pero bien, aclarado el título de la entrada y, aprovechando que hoy martes entro tarde a trabajar, puedo visionar programas en televisión que en un día normal me sería imposible. Pero claro, viendo la gran oferta de entretenimiento que se ofrece en estas horas matutinas, me dan ganas de volverme a trabajar (he dicho yo eso?, en serio?). Bueno, tanto como eso no, pero de apagar la caja tonta sí.

Vamos a hacer un repaso de lo que ofrece cada televisión en esta franja horaria:

  • TVE: Saber Vivir. ¿Pero este hombre no debería estar jubilado ya? Viva la renovación en Televisón Española.
  • TV2: Aquí hay trabajo. Perfecto programa para la época que nos ha tocado vivir. Sólo espero que sea útil para la gente.
  • T5: El programa de Ana Rosa. Prefiero beber un bote de cianuro que aguantar a esta "tipa".
  • Antena 3: Espejo público. Alarmismo por todos lados. ¿Qué tal unas notícias serias?
  • TV3: Autonómica. Els matins de TV3. Josep Cuní en estado puro. Tío calla y deja hablar a los demás. Por lo menos tratan temas interesantes.
  • C33: autonómica. Documentales. Los programas que todo el mundo ve pero que nunca tienen más de un 2% de audiencia.
  • Cuatro: estos a lo fácil, serie. Como no los va a ver nadie algo que no se desgaste por la falta de audiencia. Una serie mala, vamos.
Pues nada, visto lo que hay, me voy a comprar un microondas para el cole, que se hace mucha cola y la gente se queja.

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Desaparecido

Tiempo. Eso es lo que me falta para poder actualizar el blog. Esta última semanita ha sido de los más ocupada.

Ya hemos empezado las reuniones de padres y madres por la tarde y los miembros del equipo directivo asistimos a ellas (no a todas, sinó que nos turnamos). Así que dos de las tardes de esta semana me ha tocado ir de representante. Por suerte han sido todas muy tranquilas y no ha habido ningún padre o madre folloner@. Aún así, he llegado a casa bastante tarde.

Para hacerlo aún un poco más largo, el miércoles estuve de visita en el oftalmólogo. Todo fue de primera (excepto por la prueba de la presión ocular, el resultado fue bueno, pero me da una grima que es demasié, brrrrr) pero entre las gotas y que te trastean los ojos no pudimos coger el coche de vuelta al instante y llegamos tarde a casa.

Así que hoy ha sido el primer día de la semana que me he podido sentar tranquílamente delante del ordenador para aporrear las teclas y explicaros cosas.

Aún quedan un par de semanillas duras, pero espero que después todo se tranquilice un poquillo.

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Adivina la serie 19

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Adiós sin el corazón...

Adiós y ojalá no vuelvas, no te queremos ver más por estos lares.

Ayer, último día del mes de septiembre de 2008 (fecha a recordar por mi pareja y por mi), pagamos la última cuota del mal que afecta a todas las parejas jóvenes y muchos solteros y solteras que se han independizado o que lo van a hacer en breve.

Ayer nos deshicimos de la maldita hipoteca.

Han sido unos cuantos años de sacrificio, de primero pensar en amotizaciones y después en nosotros, de hacer cuentas y previsiones, del sablazo de cada inicio de mes, de subidas del euribor y de comisiones hasta por respirar.

Pero bueno, al final, nos hemos deshecho de ella. Ya no será más que un recuerdo, una experiencia más vivida.

Ahora nos toca pensar cómo lo vamos a celebrar. Ya os contaré.